El 20 de diciembre de 2006, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la resolución por la que se declaraba el 2011 como el Año Internacional de los Bosques.
Los bosques representan más del 30 por ciento del territorio mundial y contienen el 80 por ciento de la biodiversidad del planeta. Son las reservas naturales más importantes para los ecosistemas que los pueblan y para los 6.500 millones de habitantes que ocupamos este planeta, pues desempeñan un papel fundamental en el control del calentamiento global y en la provisión de alimentos, maderas, aceites, fibras, medicamentos, entre muchos otros. Estos ecosistemas pierden anualmente, alrededor de trece millones de hectáreas.
Las causas que se señalan son todas provocadas por los seres humanos: sobreexplotación y tala ilegal, la conversión a tierras agrícolas y ganaderas, recolección insostenible de madera, gestión inadecuada de la tierra, creación de asentamientos humanos, explotaciones mineras y petrolíferas o la construcción de embalses y carreteras, entre otras.
Los recursos forestales juegan un papel clave en las problemáticas abordadas por las diferentes convenciones ambientales de Naciones Unidas, como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y el avance de la Desertificación.
Esta celebración resultará útil para tomar mayor conciencia del papel central del ser humano en la gestión, conservación y desarrollo sustentable de los bosques debido a los beneficios económicos, socioculturales y ambientales que proporcionan, así como la implicancia de estos ecosistemas en el logro de los objetivos de desarrollo del milenio, en especial la erradicación de la pobreza.
Entre las actividades conmemorativas del Año Internacional de los Bosques figura el intercambio de conocimientos sobre estrategias prácticas que favorezcan la ordenación forestal sostenible y el retroceso de la deforestación y la degradación de los bosques.
Cobra especial relevancia en esta oportunidad, la difusión y sensibilización de la importancia de los bosques, para lo cual se han creado elementos iconográficos incluidos en el diseño del logo, que representan algunos de los múltiples valores de los bosques y la necesidad de una perspectiva de 360 grados: los bosques proporcionan refugio a las personas y el hábitat para la biodiversidad, son una fuente de alimentos, medicinas y agua limpia, y desempeñan un papel vital en el mantenimiento de un clima estable y el medio ambiente mundial.
Según información de FAO, la deforestación a nivel mundial ha disminuido en un 37 por ciento durante los últimos 10 años. A pesar de esto, PNUMA alerta que para compensar la pérdida de árboles producida durante este último decenio se necesitaría sembrar cerca de 14.000 millones de árboles por año durante los próximos diez años.
Todos podemos colaborar de diferentes maneras: aprendiendo más sobre los bosques, apreciando su importancia, plantando responsablemente especies arbóreas adecuadas a nuestra zona de influencia, proponiendo a las autoridades que realicen una planificación que defienda los bosques y a sus pobladores, a través de la creación de áreas protegidas, corredores estratégicos, apoyando a los usuarios de los recursos en la generación de prácticas eficientes y de una gestión forestal sostenible, entre otras.
Al igual que como ocurrió en el 2010 con la celebración del Año Internacional de la Biodiversidad, en este 2011 también existe una causa medio ambiental que será el eje de debates políticos y campañas de concientización: se trata del Año Internacional de los Bosques.
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